El láser alejandrita es un tipo de láser médico que emite una longitud de onda de 755 nanómetros, perteneciente al espectro de luz infrarroja cercana. Esta tecnología se basa en un cristal de alejandrita como medio activo, el cual al ser excitado genera pulsos de alta energía ideales para la absorción por parte de la melanina, el pigmento responsable del color de la piel y el vello.
Por su afinidad con la melanina, el láser alejandrita se emplea sobre todo en depilación médica láser, siendo especialmente eficaz en personas de fototipos claros con vello oscuro. También se utiliza en tratamientos dermatológicos como lesiones pigmentadas benignas (léntigos solares, pecas) y angiomas rubí, entre otros.
Este tipo de láser puede utilizarse en modo pulsado o de alta frecuencia, lo que permite adaptar la energía y duración del pulso a cada tipo de piel y tratamiento. Es considerado uno de los sistemas más potentes y rápidos en la actualidad.
Funcionamiento y aplicaciones clínicas
¿Cómo actúa el láser alejandrita?
El principio físico que rige su funcionamiento es la fototermólisis selectiva: la luz emitida por el láser es absorbida preferentemente por la melanina del folículo piloso, transformándose en calor y destruyendo la raíz del pelo sin dañar los tejidos circundantes.
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Este efecto térmico controlado también permite eliminar lesiones pigmentadas superficiales, ya que la energía del láser fragmenta los depósitos de melanina, facilitando su eliminación natural por el organismo.
Indicaciones médicas y estéticas
Los usos más comunes del láser alejandrita en clínicas de medicina estética y dermatología son:
- Depilación médica permanente: especialmente eficaz en axilas, ingles, piernas, espalda y rostro.
- Léntigos solares y manchas seniles.
- Queratosis seborreicas pigmentadas.
- Pecas (efélides) de origen genético.
- Tatuajes oscuros en fases iniciales (aunque se prefiere Nd:YAG para multicolores).
- Rejuvenecimiento cutáneo superficial y mejora del tono.
Ventajas frente a otros tipos de láser
En comparación con otros sistemas láser, como el láser de diodo (810 nm) o el láser Nd:YAG (1064 nm), el láser alejandrita presenta ventajas específicas:
Mayor eficacia en fototipos claros (I–III): debido a su alta afinidad por la melanina, actúa con mayor precisión sobre el folículo piloso oscuro.
Sesiones más rápidas: gracias a su tamaño de spot amplio y frecuencia de repetición alta.
Menor dolor percibido: muchos dispositivos incorporan sistemas de enfriamiento por criógeno o aire frío, mejorando la tolerancia del tratamiento.
Versatilidad: no solo se usa en depilación, sino también en tratamientos dermatológicos para pigmentaciones benignas.
Limitaciones y contraindicaciones
No todos los pacientes son candidatos ideales para este tipo de láser. Sus principales limitaciones son:
Ineficaz en vello claro: canas, rubio claro o pelirrojo natural no tienen suficiente melanina para absorber la luz.
Riesgo en pieles oscuras (fototipos IV-VI): puede provocar hiperpigmentación o quemaduras si no se usa con precaución.
Contraindicado en: embarazo, infecciones activas en la zona, lesiones sospechosas o tratamientos fotosensibilizantes (retinoides orales, etc.).
Preguntas frecuentes en consulta
¿Cuántas sesiones son necesarias con láser alejandrita?
En depilación médica, suelen ser necesarias entre 6 y 8 sesiones espaciadas cada 4–8 semanas, dependiendo de la zona corporal, el tipo de vello y la respuesta individual.
¿Duele el tratamiento con láser alejandrita?
El nivel de molestia es bajo o moderado. La mayoría de los equipos modernos incorporan sistemas de enfriamiento que reducen la sensación térmica. En zonas sensibles se puede aplicar crema anestésica.
¿Se puede usar en verano?
Se debe evitar el uso sobre piel bronceada, por lo que no se recomienda en pleno verano. Es fundamental usar fotoprotección alta antes y después del tratamiento.
¿Es definitivo?
Produce una reducción permanente del vello, pero pueden necesitarse sesiones de mantenimiento con los años, ya que el ciclo piloso puede reactivarse parcialmente.
Aspectos legales y normativos
En España, el uso del láser alejandrita con fines médicos está regulado por la Ley 44/2003 de ordenación de las profesiones sanitarias y por normativas autonómicas que exigen que estos tratamientos sean realizados por médicos titulados o personal sanitario bajo supervisión médica directa.
Además, los centros deben contar con licencia sanitaria y cumplir la normativa sobre equipos láser, incluyendo certificaciones CE y manuales de uso. El láser alejandrita se considera un equipo de clase IV, por lo que requiere protección ocular obligatoria y protocolos de seguridad específicos.
Cuidados antes y después del tratamiento
Antes del tratamiento
Es fundamental evitar la exposición solar y no depilarse con métodos que arranquen el vello (cera, pinzas) al menos 3 semanas antes. Se recomienda rasurar la zona uno o dos días antes del procedimiento.
Después del tratamiento
Puede aparecer enrojecimiento o leve inflamación que suele remitir en pocas horas. Se deben evitar piscinas, saunas, sol directo y productos irritantes al menos 48 h. El uso de fotoprotector SPF 50+ es imprescindible durante al menos 2 semanas.
Evolución tecnológica
Los primeros dispositivos de láser alejandrita eran voluminosos y con limitaciones en cuanto a velocidad y enfriamiento. Actualmente, marcas reconocidas como Candela GentleLase o Syneron-Candela han desarrollado plataformas más rápidas, seguras y eficaces.
Algunos dispositivos actuales permiten combinar el láser alejandrita con otros tipos de láser (como Nd:YAG), lo que permite tratar fototipos altos o zonas específicas con mayor seguridad.
¿Por qué elegirlo en una clínica?
El láser alejandrita, cuando se realiza en un entorno médico, proporciona resultados superiores respecto a la depilación estética convencional. Permite abordar tanto necesidades estéticas como problemáticas médicas como la foliculitis o el hirsutismo hormonal.
Además, es un tratamiento rápido, seguro y duradero, que ha sido validado por numerosos estudios clínicos y cuya eficacia supera ampliamente métodos caseros o estéticos de baja potencia.
El láser alejandrita es una herramienta avanzada, segura y eficaz para eliminar vello no deseado y tratar hiperpigmentaciones benignas en pieles claras. Su uso profesional permite obtener resultados duraderos, siempre que se aplique bajo supervisión médica, con equipos certificados y protocolos adecuados.
Si buscas un sistema de depilación eficaz, rápido y con evidencia clínica, el láser alejandrita sigue siendo una de las opciones más recomendadas en el sector estético y dermatológico actual.